Se denomina literatura medieval a todos aquellos trabajos escritos principalmente en Europa durante la Edad Media, es decir, durante aproximadamente mil años transcurridos desde la caída del Imperio Romano de Occidente hasta los inicios del Renacimiento a finales del siglo XV. La literatura de este tiempo estaba compuesta básicamente de escritos religiosos, concepto amplio y complejo, que abarca desde los escritos más sagrados hasta los más profanos. A causa de la gran amplitud espacial y temporal de este período se hace difícil hablar de la literatura medieval en términos generales sin caer en simplificaciones. Por ello, es más adecuado caracterizar las obras literarias por su lugar de origen, su lenguaje o su género.
Durante mucho tiempo se pensó que el medioevo fue una época oscurantista y prácticamente desprovista de manifestaciones artísticas que no obedecieran al pensamiento religioso dominante. Esto se debería a que la Iglesia como institución se convirtió en protectora del saber europeo, protegiendo libros y obras de arte de las invasiones bárbaras, pero luego controlando el acceso del pueblo a la lectura y a los libros.
Sin embargo, estudios posteriores han demostrado que hay mucho más que literatura cristiana, si bien es lo que predomina en los autores de la época.